Protocolo de Entrevistas Laborales para personas con Discapacidad Mental (cognitiva o psíquica)
Las entrevistas laborales son un desafío para todos, pero más aún para las personas con discapacidad mental. Aquí hay algunos pasos que podemos tomar para facilitar este proceso:
- Informar con anticipación al entrevistado los nombres de las personas que lo entrevistarán. Esta anticipación puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad.
- Avisar al recepcionista de la empresa que una persona con discapacidad cognitiva asistirá a una entrevista laboral.
- En cargos que requieren lectoescritura, solicitar al postulante llenar una ficha con sus datos personales.
- Presentarnos de manera clara y explicitar el propósito de la entrevista.
- Explicar paso a paso las etapas del proceso de selección.
- Si una pregunta no se entiende, no hay problema en repetirla o reformularla de una manera más clara.
- Brindar información de manera simple y directa. Es importante verificar que el entrevistado haya entendido lo que se le está explicando.
- Ser paciente y estar atento, incluso si el candidato necesita más tiempo del esperado para responder.
- En caso de una elevación de voz o alteración por parte del entrevistado, mantener la calma y redirigir la atención a una solución positiva.
- Para conocer cómo reaccionaría el candidato ante ciertas situaciones, podemos describir un escenario y preguntarle qué haría.
AJUSTES RAZONABLES EN LA EMPRESA
Discapacidad mental.
Una discapacidad mental puede conllevar varios desafíos, entre ellos la abstracción del pensamiento, la flexibilidad, el razonamiento, la resolución de problemas, el arreglo personal y la higiene, la autonomía, la modulación y articulación del habla, la organización, las relaciones sociales adecuadas al contexto y la tolerancia a la frustración. A continuación, te proponemos algunas medidas razonables que podrías implementar en tu empresa para hacer frente a estos desafíos:
Organización y rutina:
Elaborar una estructura de trabajo flexible y ordenada puede ser de gran ayuda.
- Proporcionar un horario de trabajo flexible pero manteniendo una rutina estructurada que contemple tiempos de trabajo y descanso adecuados para el empleado. Además, se debe tener en cuenta la toma de medicamentos y controles médicos del empleado.
- Ajustar el ritmo de la tarea a la capacidad del trabajador e incrementar progresivamente las exigencias a medida que éste vaya adquiriendo las habilidades necesarias.
- Estructurar una lista de tareas diarias para que el trabajador pueda marcarlas a medida que las complete.
Lugar de trabajo:
El entorno de trabajo físico puede ser de gran importancia.
- Busca un espacio de trabajo tranquilo, sin distracciones y libre de ruidos estridentes o molestos. Por ejemplo, reemplazar las alarmas sonoras por luces para indicar los cambios de turnos.
- Evitar la sobreestimulación y el exceso de interacción social.
- Permitir que el trabajador escuche música con auriculares si eso le ayuda a concentrarse.
Supervisión y apoyo:
El apoyo continuo y la comunicación abierta son claves para el éxito.
- Proporcionar retroalimentación constante sobre el desempeño laboral.
- Ofrecer asistencia en caso de evacuación o situaciones de riesgo.
- Fomentar una comunicación abierta y de confianza con los supervisores.
- Permitir que el trabajador grabe las reuniones de trabajo y las instrucciones, o facilitarle copias escritas de la información.
- Ofrece entrenamiento adicional y/o reforzado cuando el trabajador requiera aprender una nueva tarea.
- Establece objetivos que sean realizables y observables.
Discapacidad Cognitiva
Se entiende que una persona tiene discapacidad cognitiva cuando muestra un funcionamiento intelectual inferior al promedio, según las pruebas de medición.
Las causas pueden incluir:
- Discapacidad intelectual: se caracteriza por limitaciones en el funcionamiento intelectual y en el comportamiento adaptativo (conceptual, social y práctico), que comienza durante el período de desarrollo.
- Trastorno del espectro autista: se caracteriza por una deficiencia persistente en la comunicación e interacción social en diversos contextos.
- Trastorno por déficit de atención/hiperactividad: se caracteriza por la presencia de un patrón persistente de inatención y/o hiperactividad-impulsividad que interfiere con el funcionamiento o el desarrollo.
Aquí algunas medidas razonables para considerar en el lugar de trabajo:
- Asigna un ‘tutor’ que pueda guiarlos y ayudarlos durante las primeras semanas/meses después de su incorporación.
- Proporciona instrucciones de manera concreta y clara. Si es necesario, puedes usar tarjetas escritas o pictogramas dibujados para ayudar a explicar mejor lo que se necesite.
- Diseña una estrategia para anticipar los cambios en la rutina laboral. Evita cambiar las tareas de manera improvisada.
- Recuerda al trabajador cada cierto tiempo, los plazos o fechas importantes.
- Divide las tareas grandes en tareas más pequeñas y manejables. Esto hace que sea más fácil visualizar el progreso y las metas diarias.
- En caso de trabajar con cadenas de producción o orden de productos, implementa señalizaciones para organizar las piezas o productos y ayudarles a saber qué se ha hecho y qué queda por hacer.
- Organiza los materiales de trabajo utilizando conceptos claros y familiares, imágenes, símbolos o códigos de color.
- Señaliza las áreas de trabajo con símbolos para facilitar la orientación y organización.
Discapacidad Psíquica
Las discapacidades psíquicas se refieren a condiciones que pueden afectar el comportamiento de una persona, su manera de pensar o sus emociones. Algunos ejemplos son la esquizofrenia, la depresión, el trastorno bipolar, los trastornos de ansiedad, el trastorno obsesivo-compulsivo y los trastornos de la personalidad.
Consideraciones y ajustes razonables que pueden realizarse en el lugar de trabajo para hacerlo más acogedor para personas con estas condiciones:
- Fomentar un ambiente de trabajo en el que se hable abiertamente sobre la salud mental. Esto puede ayudar a las personas a sentirse más cómodas compartiendo lo que necesitan.
- Flexibilidad en el horario: Algunas personas pueden tener días en los que les resulta difícil trabajar. Considerar permitir horarios flexibles o días de descanso según sea necesario.
- Soporte emocional: Considerar tener a disposición servicios de apoyo emocional, como un consejero o un programa de asistencia a los empleados.
- Zonas de descanso: Proporcionar espacios tranquilos donde las personas puedan tomarse un descanso si se sienten abrumadas.
- Ajustes en la carga de trabajo: Algunas personas pueden necesitar ajustes en sus responsabilidades laborales, especialmente durante los períodos de estrés.